Louise se presenta con su obra y con su pensamiento:
-La expresión de uno mismo es signo de lo sagrado y de la fatalidad.
-Mis obras son el miedo a la caída, luego aquello pasó a ser el arte de caer, de como caer sin herirse, y más tarde se convirtió en el arte de quedarse colgado.
-Todos los días uno tiene que abandonar su pasado ó aceptarlo, entonces, si no puede aceptarlo, se hace escultor.
"El vértigo es algo diferente del miedo a la caída. El vértigo significa que la profundidad que se abre ante nosotros nos atrae, nos seduce, despierta en nosotros el deseo de caer, del cual nos defendemos espantados". Así definía el vértigo Milan Kundera, y así nos sentimos al enfrentarnos a una obra de Louise Bourgeois.
La escultora habla de sí misma con su obra, y del mismo modo nos remite a nuestra identidad, que también está formada por recuerdos; la diferencia radica en el hecho de que Ella revisita los suyos una y otra vez con el fin de dominar sus temores y encontrar su reafirmación. En cierto modo Bourgeois también siente vértigo.
La serie de Spiders de 1994/97, son obras arquitectónicas además de esculturas en sí mismas, ellas simbolizan el recuerdo de su madre, en el sentido de aportarle protección gracias a la laboriosidad continua a pesar de su fragilidad. Estas arañas reciben el nombre de MAMAN, con más de nueve metros de altura, la escultura es de acero y mármol (adquirida por la Tate Gallery, Londres), de la cual la artista realizó nueve obras más en bronce.
Las arañas de bronce de Bourgeois se exponen en el Museo Guggenheim de Bilbao, el Samsung Museum of Art, Seul, Corea, MoriaArtCenter, Tokio, Japón, y la National Gallery of Canada, Ottawa, Canada.
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